La 1ª declinación o temas en -a, está formada por palabras cuya raíz termina en *-ᾱ/-ᾰ. Ya en época temprana, en el dialecto jónico-ático la ᾱ se cierra y se transforma en η. No obstante, en ático se mantendrá la ᾱ precedida de ρ, ι, ε: ἀγορά, ágora; σοφία, sabiduría; θέα, diosa. Realmente, lo que ocurre en ático es una "retroversión" del cierre articulatorio en determinados contextos fonéticos. Por tanto, podemos hacer la siguiente clasificación:
– Temas en -ᾱ o en -η: procedentes de temas no alternantes. Son femeninos (sust. y adj.) y masculinos (sust.)
– Temas en -ᾰ / ᾱ: procedentes de temas alternantes. Son femeninos (sust. y adj.) con η en genitivo y dativo singular
Dicho de otra manera, en esta declinación nos encontramos varios tipos tanto entre los femeninos como entre los masculinos, sean sustantivos o adjetivos, que se diferencian en el singular, pues es plural de todos ellos es el mismo.
– Temas en α pura | Femeninos y masculinos Ante la -α del tema, tienen ρ, ι, ε (-α -ας / -ας -ου). Son temas en -ᾱ no alternantes |
– Temas en -α mixta | Sólo femeninos Ante la -α del tema, no tienen ρ, ι, ε (-α -ης). Son temas alternantes *-ᾱ/-ᾰ en singular |
– Temas en -η | Femeninos y masculinos Llevan -η en el nominativo(-η -ης / -ης -ου). son temas en -ᾱ no alternantes |
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Además, al igual que en la 2ª declinación, también aquí hay formas contractas. Estas surgen de la contracción de una vocal -α o -ε de la raíz con la desinencia, de modo que -α-‐ > ᾱ y -εα- > η (o -ᾱ ante ρ, ι, ε). Pueden ser tanto sustantivos como adjetivos (sólo los femeninos) y su única marca es que siempre son perispómenas (acento circunflejo en la última sílaba). Siguen este modelo palabras como Ἀθηνάα > Ἀθηνᾶ, γέα > γῆ, ἀργυρέα > ἀργυρᾱ (y no *αργυρή)
| Ἀθηνάα > Ἀθηνᾶ | γέα > γῆ | Ἑρμῆς | Βορρᾶς |
SING. | Nom | Ἀθηνά-ά > Ἀθηνᾶ | γέ-α > γῆ | Ἑρμῆς | Βορρᾶς |
Voc | Ἀθηνά-ά > Ἀθηνᾶ | γέ-α > γῆ | Ἑρμῆ | Βορρᾶ |
Acus | Ἀθηνά-άν > Ἀθηνᾶν | γέ-αν > γῆν | Ἑρμῆν | Βορρᾶν |
Gen | Ἀθηνά-ᾶς > Ἀθηνᾶς | γέ-ης > γῆς | Ἑρμοῦ | Βορροῦ |
Dat | Ἀθηνά-ᾷ > Ἀθηνᾷ | γέ -ῃ > γῇ | Ἑρμῇ | Βορρᾷ |
PL. | Nom | Ἀθηνά-αί > Ἀθηναῖ | γέ-αι > γαῖ | Ἑρμαῖ |
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Voc | Ἀθηνά-αί > Ἀθηναῖ | γέ-αι > γαῖ | Ἑρμαῖ |
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Acus | Ἀθηνά-άς > Ἀθηνᾶς | γέ-ας > γᾶς | Ἑρμᾶς |
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Gen | Ἀθηνά-ῶν > Ἀθηνῶν | γέ-ῶν > γῶν | Ἑρμῶν |
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Dat | Ἀθηνά-αῖς > Ἀθηναῖς | γέ-αις > γαῖς | Ἑρμαῖς |
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Observaciones:
1. Al igual que en la flexión temática, las desinencias se funden a veces con la vocal -a final del tema, formando terminaciones en las que no siempre es fácil aislar por entero el morfema.
2. En el gen. y dat. sing. de los temas con nom. en -ᾰ (tipo δόξα) encontramos η. Esto se debe a que, en el origen de estos temas, está un antiguo sufijo alternante *-yᾰ/-yᾱ, especializado en la formación de femeninos (tanto alfatemáticos, con desaparición de la yod, como δόξα, σφῦρα, como temáticos, por ejemplo λύουσα, λύσασα, βᾶσα, λελυκυῖα, μέλαινα): tenemos así τράπεζα, τράπεζαν, τραπέζης, etc.; ἀλήθεια, ἀλήθειαν, ἀληθείᾱς, etc. (Así se diferencian casos rectos de casos oblicuos, procedimiento arcaico heredado del indoeuropeo, aunque sólo en el sing., pues el plural toma por analogía la forma de los temas en -ᾱ).
3. En gran número de palabras de los temas masculinos, el voc. sing. tiene una desinencia -α breve, que continúa una antigua alternancia en los nombres en -της (τοξότᾰ), en ciertos compuestos (γεωμέτρᾰ, μυροπῶλᾰ), en algunos nombres propios (Σκύθα, Πέρσα) y en algunos otros nombres comunes (νύμφᾰ, δέσποτᾰ –con retroceso del acento). Otros nombres de persona tienen voc. sing. en -η (Θουκυδίδης͵ voc. Θουκυδίδη).
4. Como en la flexión temática, el lugar del acento no varía en el curso de la flexión, salvo cuando lo impone la cantidad larga de la última sílaba: ἄνθρωπον, pero ἀνθρώπων; τράπεζα, pero τραπέζας. Sin embargo, el gen. pl. es siempre perispómeno en -ῶν, lo cual es sólo una excepción aparente, ya que procede de una contracción. En algunos términos hay rastros de la movilidad inicial del tono, que servía para oponer los casos rectos a los oblicuos, como es frecuente también en la flexión atemática: μία, μιᾶς.
5. Entre los masculinos, hay que notar la importancia del sufijo -της de agente, que forma muchos sustantivos en griego, como ποιητής o ναύτης, formas que tenemos documentadas en latín y en castellano como poeta y nauta.
Es fácil, también en esta declinación, reconocer la coincidencia entre las terminaciones de esta declinación y las de su equivalente latina:
a) La flexión de los temas en -α coincide con los temas en -a.
b) Las aparentes diferencias se deben a tratamientos fonéticos distintos y propios de cada lengua. Así el genitivo plural en la 1ª y 2ª declinación, en ambas lenguas, procede de una antigua forma indoeuropea *-sōm (propia de los pronombres) que, al unirse a los temas en -a, da -arum en latín, por el fenómeno fonético llamado rotacismo (paso de s a r entre vocales), mientras que en griego la s entre vocales desaparece y *-άσων se transforma en -ῶν.
c) En el acus. pl. *-ams desaparece la nasal ante la -s y alargan las vocales en ambas lenguas.
| Singular | Plural |
| No alternante | Alternante |
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Nom | * -ā > -ᾱ / -a | * -ă > -α / -a | * -a-i > -αι / -ae |
Voc | * -ā > -ᾱ / -a | * - ă > -α / -a | * -a-i > -αι / -ae |
Acu | * -ā-m > -ᾱ-ν /-am | * - ă -m > -α-ν /-am | * -ā-m-s > -ᾱς (<* -ᾰ-νς) / -ās |
Gen | * - ās > -ᾱς / ae (por influencia de la 2ª) | * -ā -sōm > -ῶν / -arum |
Dat | * -ā-i > -ᾳ / -ae | * - ā-is > -αις / -is |